Editorial
Editorial
Salomón Kalmanovitza
a Profesor Emérito Universidad Jorge Tadeo Lozano. Correo electrónico: tiempoyeconomia@utadeo.edu.co
Es hora de que en Colombia surja una publicación especializada en historia económica, empresarial y del pensamiento, después de más de una década de prolífica investigación en las universidades del país y en el Banco de la República. El banco central colombiano ha liderado una importante iniciativa en el desarrollo de la historia cuantitativa colombiana, manifiesta en cuatro volúmenes colectivos, publicados por el Fondo de Cultura Económica, y en libros sobre el crecimiento económico de largo plazo, la historia del transporte y el desarrollo de la agricultura. Así mismo, varias facultades de Administración han acumulado un gran número de libros y monografías sobre la historia de las empresas de Colombia y de la América Latina. Finalmente, es notorio el interés despertado por la historia de las ideas económicas y políticas, y se ha tomado conciencia de su importancia para entender la historia de un país o entender mejor la estructura de un pensamiento o de una obra.
Son muchos los avances y los grupos de investigación en Colombia que laboran estos temas y que les corresponde publicar en revistas de historia o de economía, dispersando esfuerzos y dificultando la construcción de una comunidad académica especializada pero a la vez abierta a enfoques no económicos. Aspiramos a llenar estos vacíos precisamente con la revista electrónica Tiempo&Economía, que será gratuita y de acceso universal.
Nuestro objetivo no es solamente nacional: estamos convocando a los investigadores del continente y del mundo a que participen en esta aventura del conocimiento. Así lo reflejan la política de publicar ensayos en español, portugués e inglés y nuestras activas relaciones con las asociaciones de historia económica de América Latina y la península Ibérica y con la Asociación Internacional de Historia Económica.
Esperamos contar con una participación activa de nuestros lectores por medio de comentarios críticos a los ensayos publicados, notas sobre nuevos trabajos, reseñas de libros y debates entre distintas posiciones y enfoques.
Nuestro primer número cuenta con la participación de jóvenes pero curtidos investigadores como Joaquín Pinto, quien después de un concienzudo trabajo de archivo descubre un universo poco conocido sobre la historia de Panamá y su fiscalidad, que se extiende entre 1780 y 1845. Se trata también de una aproximación a las finanzas coloniales y su transformación por la Independencia y una república incipiente y débil que a duras penas podía gobernar sus regiones y menos lo podía hacer desde el altiplano andino sobre el lejano istmo panameño. Se trata pues de una investigación que abre nuevos derroteros para el análisis de la fiscalidad colonial y de la que fue instaurada después de la Independencia en la América hispánica.
Un ensayo del filósofo Lisímaco Parra se pregunta por el estado de conciencia de la intelectualidad neogranadina en la recepción de las ideas hedonistas y pragmáticas de Jeremías Bentham, tan admirado como poco comprendido por algunos, refutado o prohibido por otros. Parra concluye que una educación católica, basada en la doctrina de la ley natural, no podía absorber adecuadamente los conceptos de la filosofía utilitarista del filósofo inglés, que tomaba como punto de partida la doctrina hedonista, juzgada como pecaminosa por los pensadores católicos. La caracterización que hacen algunos historiadores de la recepción "ecléctica" de las ideas modernas es insuficiente, según Parra, para explicar su entendimiento y absorción escasos en el estrecho círculo intelectual de la incipiente república.
Publicamos un interesante artículo de Andrea Dupuy sobre los precios del ganado en el mercado del Buenos Aires colonial, que manifiestan una regularidad notable y una baja de largo plazo que sugiere relaciones estables y crecientes de oferta, también de demanda en su componente de cueros, aunque hubo algunos períodos críticos que no cambian la evolución de largo plazo de tan importante mercado. Existían, como en todo el Imperio hispánico, controles de precios a las subsistencias que imponían los ayuntamientos; en el caso de la provincia de Buenos Aires, se da un crecimiento notable del hato, interrumpido de vez en vez por sequías, pestes o caídas en la exportación de cueros que reducían el sacrificio de las reses.
Kelly Acuña y Andrés Álvarez analizan cuidadosamente la relación entre billetes de banco emitidos en Medellín y Bogotá y monedas de oro y plata, durante la escasamente conocida fase de la banca libre (1870-1886) en los Estados Unidos de Colombia. Ellos demuestran que la minería antioqueña del oro aportaba metal para la circulación monetaria que se combinaba de manera particular con las emisiones de billetes de los bancos de la región, algo que en la plaza de Bogotá no era tan evidente, aunque sí lo era con las monedas de plata en ambas regiones.
Por último, en la sección de ensayos, Susana Merlo y Mercedes Muro de Nadal hacen un análisis comparativo de los sectores agroindustriales de Brasil y Argentina para ofrecer una explicación del extraordinario desarrollo del primero frente al relativo estancamiento del segundo. A pesar de los vínculos establecidos por el Mercosur y la emulación que era de esperarse en las políticas públicas de ambos países, Brasil favorece decididamente a sus empresarios agroindustriales, invierte en investigación y desarrollo y les brinda condiciones favorables para su expansión, mientras que Argentina más bien los reprime, incluyendo la introducción de pesados impuestos a sus exportaciones.
En avances de investigación, Giuseppe De Corso hace un nuevo cálculo del PIB de Colombia entre 1888 y 2012 que cuestiona el producido por Miguel Urrutia y el grupo de investigación, GRECO, del Banco de la República, con base en un modelo monetario, publicado en el libro El crecimiento económico de Colombia en el siglo XX, Bogotá: Fondo de Cultura Económica, 2002. De Corso deriva su serie desde el enfoque de la demanda, define una canasta de consumo a través del tiempo, calcula la inversión recurriendo a las importaciones de bienes de capital, el saldo de comercio externo y el gasto público para generar un PIB más anclado en la realidad.
En la sección de reseñas, Oscar Granados presenta el importante libro de James Torres, Minería y moneda en el Nuevo Reino de Granada, resultado de una tesis de maestría de la Universidad Nacional de Colombia, y que plantea novedosos métodos de análisis cuantitativo del desarrollo económico colonial.